La Asociación Provincial de Empresarios del Transporte y Agencias de Málaga (Apetam) ha impugnado, a través de Fedintra, el concurso público de rutas de transporte escolar de la provincia malagueña, que afecta a casi 25.000 alumnos y cuyo precio de licitación de alrededor de 66 millones de euros. Lo mismo ha hecho Atedibus sobre el concurso de transporte escolar de Sevilla.

Se trata de 41 lotes de diferentes rutas escolares en Málaga que han sido licitadas a través de la consejería de Educación de la Junta de Andalucía a través de la gerencia provincial de la Agencia Pública Andaluza de Educación (APAE). El precio de la licitación de este concurso es de 33.138.102 euros, que al tratarse de un contrato de dos años, supera los 66 millones de euros.

Desde Apetam explican que “tras el severo golpe recibido por el sector del transporte escolar, al no entender la licitación lanzada en estos momentos por la Administración, sin escuchar ninguna de las peticiones ni tener la más mínima sensibilidad con la agobiante situación de un sector paralizado, los profesionales ven ahora argumentos jurídicos para impugnar la licitación y, por tanto, paralizar el proceso, por numerosas irregularidades técnicas y administrativas”.

“No han contado con el sector, en una crisis tan grave como la que estamos viviendo, y encima lo han lanzado con muchas irregularidades técnicas y administrativas que pueden dar lugar a la paralización total del proceso”, ha declarado el presidente de la asociación, Juan Sierra.

Por su parte, el servicio de transporte escolar en la provincia de Sevilla afecta a casi 9.500 alumnos repartidos en 133 rutas, cuyo concurso cuenta con un precio de licitación que ronda los 45,7 millones de euros. La impugnación se basa también en “numerosas irregularidades técnicas y administrativas”, según ha denunciado Atedibus.

Su presidente, Manuel Gutiérrez, ha asegurado que “la consejería de Educación nos ha abandonado a nuestra suerte, no ha querido dialogar con el sector y nos ha dado la espalda. Este concurso perjudica a los que de verdad generamos riqueza en Andalucía, que somos las pequeñas y medianas empresas, y en mitad de esta grave situación económica, no busca soluciones para este sector, sino que fomenta nuestra desaparición, y esto no lo vamos a consentir”.